la verdadera adoracion

Principios de una verdadera adoración
Juan 4:20-24
INTRODUCCIÓN:
La rutina, la negligencia, la indiferencia ha invadido a nuestros servicios, parece que Dios ya está ausente de nuestros cultos, hemos perdido la perspectiva, nuestra llamada adoración no dista mucho de un evento deportivo. Es necesario de una manera impostergable y urgente renovar, entender a quien adoramos. El mismo Jesús nos da las pautas de una verdadera adoración.

CUERPO:
EL LUGAR DE ADORACIÓN NO TIENE IMPORTANCIA (V 20-21) Antes de Cristo era una necesidad adorar en el templo, ahora nosotros somos el Templo del Espíritu Santo, no tiene importancia el Dónde?, sino el Cómo?, no interesa la forma sino el fondo, el envase sino el contenido.
HAY QUE ADORAR CON entendimiento (v 22)
Es necesario saber quien es el objeto de nuestra adoración. El es Santo (Is. 6:3), fuego consumidor (Hb. 12: 28-29), es Todopoderoso es nuestro padre.
LOS VERDADEROS ADORADORES TIENEN QUE ADORARLO EN ESPÍRITU Y EN VERDAD (v 23)
ESPÍRITU: Somos espíritu, cuerpo y alma (1 Te. 5:23)para una verdadera adoración se requiere que nuestro espíritu esté conectado con Dios, sea santo como El es santo (1Pe.1:16),solo los santos adoran a Dios, la misma debe fluir de dentro hacia afuera y no al revés que es sensualidad, brotar de un corazón contrito y humillado (Sal. 51:17).
VERDAD: Tiene que ver con la identidad con Dios, con la consecuencia de nuestros dichos y hechos sino El nos dirá: "Tus hechos hablan tan fuerte que no puedo escuchar tus alabanzas", es adorar con toda nuestra mente, nuestro corazón y nuestras fuerzas (Lc.10:27), debemos presentar nuestros cuerpos como holocaustos y quemarnos delante de él (Ro. 12:1)en suma adorar es cumplir su palabra. Para que haya calor en nuestras iglesias es necesario buenos hornos vacíos de nosotros llenos de leña que es la palabra de Dios y el fuego que es la presencia del Espíritu Santo.
DIOS ESTA BUSCANDO VERDADEROS ADORADORES (v 23.24) Dios nos ha creado para su honra y gloria (Is. 43:7)por todo lo que significa estamos obligados a rendirle una merecida adoración.
CONCLUSIÓN:
Es urgente empezar con una verdadera adoración, para que haya avivamiento en nuestras iglesias, sin olvidarse que todo avivamiento empieza en nuestro corazón, si es así no estaremos desesperados en presentar dramas, humor, luces, humo sonido para lograr entusiasmar y atraer a la gente, el Espíritu Santo se encargará de hacerlo.
Eliseo reyes